La historia de siempre, nosotros nos quejamos sin cesar de nuestra crisis y el azote a las clases medias, y últimamente estamos olvidándonos desde la comodidad casera de una parte del mundo que vive 100 veces peor que nosotros,.
África siempre es la gran olvidada, una tierra tan bella como pobre, con una cultura ancestral y más de 2000 lenguas diferentes en uso que se conozcan, 54 países y una población de 922 millones de habitantes es además el tercer continente más grande del globo.
A pesar de su extensión y la gran cantidad de materias primas que exporta ( en torno al 80% ), con un 60% de la población empleada en trabajos rurales, es el continente más pobre con un PIB que sólo corresponde a un 2.6% del total mundial.
Para Europa parece que África sólo sea una gran extensión de tierra muerta, habitada por pobres niños desnutridos que la gente apadrina a distancia sin mojarse demasiado para limpiar un poco su conciencia, y una fuente infinita que explotar de petróleo con el que el resto del mundo se enriquece por millones, mientras ellos principales proveedores mueren de hambre y de infinidad de enfermedades por falta de higiene, recursos o educación.
Sólo en África subsahariana viven el 68% de todos los infectados de VIH del mundo, de los cuales la escalofriante cifra del 61% son mujeres, y en Sudáfrica con 5.5 millones de habitantes infectados, más del 90% son mujeres de entre 15 y 24 años.
Los datos son absolutamente increíbles sobre todo teniendo en cuenta que se supone somos todos en conjunto una sociedad avanzada y civilizada, ¿ Cómo podemos permitir esto?
Sin la ayuda necesaria, nunca podrán avanzar, y mucho menos si no intentamos instruir desde la base, con un acceso total a la educación, para que ellos mismos desarrollen sus actividades y tecnologías, sin necesidad de recurrir a terceros.
En este vídeo nos muestran la labor del Doctor Moses Musaazi, que lleva más de 20 años intentando innovar y ayudar a su comunidad en Uganda, con una empresa propia que emplea 250 trabajadores, se centra en su invento MakaPads, unas compresas higiénicas totalmente fabricadas allí a partir de papel reciclado y otros materiales, con un coste mínimo que ayudan a miles de niñas y mujeres que no pueden llevar una vida normal cada vez que sufren el período porque ni siquiera pueden acceder a algo tan básico.
MAKAPADS | Francois Vaxelaire & Sara Fusco from Focus Forward Films on Vimeo.
1 comentario:
Creemos ser una sociedad civilizada y que avanza pero estamos involucionando a pasos agigantados.
Lo que ocurra en África o en Asia o en Sudamérica nos la sopla mientras podamos tener nuestras necesidades cubiertas. Ahora que muchas fallan nos quejamos más que nunca y nos fijamos (más que nunca) en nosotros mismos, así que ni las crisis ni las no-crisis parecen que vayan a cambiar nuestra visión de otros lugares más pobres que el nuestro.
Asco, asco y más asco.
Aplaudo la iniciativa de este hombre.
Un beso!
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